La noche del 2 de mayo estuve tocando en el restaurante Can Rústic (Av. Hospital, 6) en Sant Celoni. Desconozco desde cuando hacen conciertos. La verdad es que no es un local que dé la impresión que acoja música en directo. La experiencia me dice que a veces el lugar no importa y sí la gente que acude. Bueno, en esta ocasión una mesa de tres personas prestaba atención. El resto era un ir y venir de gente que no estaba demasiado por el concierto. En fin, una pena. Estuve bastante bien. Aproveché para estrenar una nueva canción: "El más grande hijo de puta". Un tema cortito y con letra vacilona. Estoy seguro que se convertirá en un fijo. A veces ante la indiferencia de la gente, me pregunto si no debiera intentar escribir material más accesible. Cuando me siento a ello sin embargo, el resultado es más bizarro y cenizo de lo habitual. No seré yo el que le ponga ningún tipo de límite a la creación y a la libertad expresión. Ayer me quedé de lo más agusto cantando: "Maltrato a mis novias menores de edad pero en el fondo saben que las quiero. Soy el más grande hijo de puta. No te sientas culpable por desearme pues tengo mi corazoncito."
El repertorio que interpreté fue el siguiente: 01-Mi vida no es un musical 02-El más grande hijo de puta 03-Loco por el fútbol 04-Todo está fatal 05-Sofia 06-Hay que matar a un cantautor 07-Come on (Chuck Berry) 08-Todo te sale mal 09-El amor es una puta mierda 10-Elvis ha dejado el edificio 11-Mi novia era nazi 12-Mis amigos (una oración) 13-Ser famoso/Colgad al DJ (The Jam/The Smiths).
Aprovecho para dar las gracias a Roger y Pep por su atención durante la noche. También dar las gracias a los jefes de Renfe por no poner taquilleras expendiendo billetes y máquinas que sólo funcionan con tarjeta de crédito en la estación de Passeig de Gràcia. Con la T-10 llegué hasta Sant Celoni.
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